DEL PUEBLO LLAMADO METODISTA AL PUEBLO DE MÉXICO

“Bendecid a los que os persiguen, bendecid y no maldigáis, gozaos con los que se gozan, llorad con los que lloran”.

Romanos 12:15-16

CONSTRUIR LA JUSTICIA Y LA PAZ INSPIRADOS POR DIOS

Como pastores del pueblo de Dios -del que provenimos y al que servimos- nos dirigimos a todos los miembros de la Iglesia Metodista de México, para compartir nuestra perspectiva sobre un aspecto inquietante de la realidad nacional.

Como obispos, sabemos que estamos sometidos a exigencias éticas en nuestro actuar y nos reconocemos responsables ante Dios, quien pedirá cuenta de nuestras acciones. No pretendemos erigirnos en acusadores sin reconocer nuestras propias deficiencias, las cuales no nos exime de nuestro deber de contribuir al bien común por medio de la Palabra de Dios. Ella nos recuerda esas exigencias éticas a las cuales todos estamos sometidos y que constituyen el fundamento de una vida integral de todo ser humano.

Los cristianos metodistas, expresamos que nuestra fe reside sólo en la Palabra de Dios y que Jesucristo es nuestro Señor y Salvador, y el Señor de la vida y su proyecto es darnos vida y vida en abundancia. Reconocemos que en la Palabra de Dios se nos ha llamado a llorar con los que lloran y a gozarnos con los que se gozan, e igualmente nuestro Credo Social nos invita a tomar nuestra responsabilidad social como hijos de Dios, en los lugares donde vivimos, Por lo tanto:

En primer lugar, invitamos a nuestras iglesias a solidarizarnos con los papás y familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero a interceder ante el Señor a fin de que sean fortalecidos y rogar en la esperanza de que les sean entregados a sus hijos con vida. Deseamos decirles que su sufrimiento es el nuestro, su dolor es el nuestro y su esperanza igual es la nuestra.

De la misma manera invitamos a las iglesias a orar y acompañar a los inmigrantes y sus familiares, quienes han sido violentados, por los niños y las niñas que han sido secuestrados y/o extorsionados, vendidos y/o obligados a prácticas sexuales, violentando sus vidas, por los que sufren bullying y discriminación, por las viudas y por los ciudadanos de capacidades diferentes.

En segundo lugar, expresamos nuestro dolor también por quienes se han dejado llevar por la avaricia, el poder y el pecado y han sido los autores intelectuales y materiales de la desaparición de los jóvenes estudiantes. Oramos por ellos y por todos los que están viviendo estas prácticas ajenas a la justicia y al amor, porque sus vidas sean quebrantadas, busquen el arrepentimiento y reciban el perdón del Señor y por supuesto, sea aplicada la justicia.

En tercer lugar, expresamos que el pecado es un mal que se ha arraigado en el ser humano, y que en todos los niveles de nuestra sociedad ha hecho daño, a través de la violencia, la  injusticia y la destrucción de la vida. Reconocemos que la falta de amor, de justicia y paz, son la razón de estos problemas y que como siervos del Señor estamos luchando con el mandato de Jesucristo de “amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos”,  y así cumplir con nuestra misión de extender el Reino de Dios, a fin de ir erradicando dichos males inmersos en la sociedad de la que somos parte.

Oramos por los gobiernos en todos los niveles de nuestro país, y asimismo, los que están en autoridad y poder, para que gobiernen con verdad y justicia para todos. Oramos para que busquen a Dios, de modo que sus planes, programas, proyectos y decisiones, sean para el beneficio de todos los mexicanos y de esta forma sigamos trabajando en paz y en armonía con la esperanza de un futuro mejor, donde no haya más pobres, ni desempleo, ni violencia y vivamos en paz.

Hoy, nosotros, discípulos  de Jesús junto con todos los pastores y pastoras en nuestra nación, que formamos la Iglesia Metodista en México, les invitamos a perseverar en la oración y suplicar por la paz, la reconciliación y la unidad en el país.

Por lo que convocamos a todas nuestras iglesias metodistas en el país, a una REUNIÓN DE ORACIÓN NACIONAL, para el día 2 de noviembre a las 18:30 horas, y una más que organice cada conferencia, en sus iglesias céntricas, con el propósito de orar juntos a lo largo y ancho del país e interceder ante el Señor, por la aparición con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa, por la fortaleza de sus familias, por la erradicación de la injusticia y la violencia, por la convivencia en el amor del Señor en todos los ámbitos de la sociedad, en las familias, en las comunidades, en las iglesias y en el gobierno.

Puebla, Puebla, 29 de octubre 2014

 

Atentamente

Colegio de Obispos de la Iglesia Metodista de México, A.R.

Obispo Juan Pluma Morales, Conferencia Anual Septentrional. Presidente
Obispo Felipe de Jesús Ruíz Aguilar, Conferencia Anual Noroeste. Secretario
Obispo Andrés Hernández Miranda, Conferencia Anual de México.
Obispo Cruz Hernández Vargas, Conferencia Anual del Sureste.
Obispo Fernando Fuentes Amador, Conferencia Anual Oriental.
Obispo David Ibarra Álvarez, Conferencia Anual Norcentral.

Documento:

Comunicado a la IMMAR y a la Sociedad Mexicana

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