Por la Vida y la Familia

por la vida

Durante la Concentración Por la Vida y la Familia, celebrada en la Macroplaza de la Ciudad de Monterrey, el sábado 13 de agosto de 2016, donde se reunieron entre 6,000 y 8,000 personas pertenecientes a iglesias evangélicas y asociaciones civiles diversas, se expusieron varios discursos y el Obispo Fernando Fuentes A, elevó una oración. El motivo de la Concentración fue la canalización mediante firmas de un posicionamiento dentro de la Cámara de Diputados de la Federación contrario a la iniciativa presidencial en favor del “matrimonio igualitario” y sus derivados. Uno de los discursos escuchados fue el del Lic. Alberto Gloria Argueta, mismo que a continuación transcribimos con el debido permiso concedido.

Ante el anuncio de una iniciativa de ley que creemos perjudica gravemente a la familia natural, a nuestros hijos y a un gran sector de nuestra sociedad, debido a la problemática que encierra la “ideología de género”, hacemos público nuestro posicionamiento desde el punto de vista social.

PRIMERO

Creemos que el Estado tiene como primera responsabilidad garantizar la vida, y la familia heterosexual es la única garantía para la procreación de la vida.

El matrimonio es el marco jurídico que protege la unión de un hombre y una mujer, y por ello debemos proteger al matrimonio puesto que de él se genera la vida.

Todos los seres humanos, incluso los de preferencias sexuales distintas a la heterosexualidad, nacieron de la relación entre un hombre y una mujer.

SEGUNDO

Se nos quiere imponer una ideología de género desde la plataforma de la educación más temprana de nuestros niños, lo que causaría confusión en ellos en lo relativo a su identidad sexual, la complementariedad del sexo opuesto, y su comprensión sobre las relaciones naturales entre un hombre y una mujer.

La iniciativa del mal llamado “matrimonio igualitario” está declarando a la sociedad que los niños no necesitan a una madre ni a un padre para su correcto desarrollo. Y decimos que es mal llamado “matrimonio igualitario”, porque según se entiende el matrimonio desde su raíz etimológica, debe haber una matriz, y la función de la matriz es procrear con la ayuda necesaria del complemento masculino.

TERCERO

El Estado es laico, y así como no se puede enseñar religión alguna, o política, en las escuelas públicas, tampoco se debería impartir una “ideología de género”. La educación que el Estado ofrece debe ser imparcial, y estar libre de toda ideología.

Los padres tenemos el derecho de educar a nuestros hijos conforme a los principios y valores que creemos. Y hoy estamos aquí para defender ese derecho, y por eso no aceptaremos que se nos impongan otras ideas distintas.

CUARTO

Es inaceptable que las leyes degraden la moral y pongan en riesgo la salud pública.

Pensamos también en las familias cuya conciencia sería obligada a aceptar una ideología que ataca y ofende sus principios y valores.

Además, no podemos olvidar que México es un país de fe, y no se está considerando el atropello que sufrirán los principios propios de la fe, cualquiera que sea la religión de los ciudadanos mexicanos. El Estado está obligado a ser respetuoso para con todos.

QUINTO

Cualquier imposición del Estado estaría desmantelando la democracia que lo instituyó.

La probable aprobación del Congreso de esta iniciativa, sería un atentado también a la democracia, toda vez que no se está consultando la opinión de los ciudadanos mexicanos.

Una ley antinatural no tendría otro camino más que la imposición, y esto es lo que se pretende llevar a cabo con la mencionada iniciativa.

SEXTO

El Estado debe velar por el bien mayor de los niños en adopción, si se hiciera un consenso para escuchar la opinión de los niños, resultaría obvio que no estaría dentro de su modelo mental pertenecer a una familia homoparental; ellos de manera natural piensan en un papá y una mamá, en cuanto a una familia se refiere.

SÉPTIMO

Es ilógico, y queda fuera de todo sentido común, el desechar la biología y la antropología, para suplantarlas por una mera ideología.

La biología y la antropología son ciencias comprobadas, mientras que una ideología es simplemente un conjunto de ideas pertenecientes a una colectividad. ¿Suplantaremos la ciencia por las meras ideas?

En biología y antropología sólo existen dos sexos: Hombre y mujer.

OCTAVO

La iniciativa enviada al Congreso atenta contra los derechos constitucionales, como lo es la libertad de expresión, al tacharnos de homofóbicos por el hecho de manifestar nuestro desacuerdo con el estilo de vida de la diversidad sexual.

Atenta contra nuestra libertad de conciencia, al querer imponernos una ideología por encima de nuestras convicciones.

Atenta contra el laicismo del Estado, cuando se asume una línea ideológica como parte obligada de la educación.

Atenta contra la democracia, al no consultarnos sobre una decisión que se intenta tomar y que afecta directamente nuestra vida familiar y el futuro de nutro país, entre otros derechos y garantías que serían vulnerados.

NOVENO

Rechazamos toda clase de discriminación, y por lo tanto nos oponemos a ser discriminados por abrazar una forma de vida que promueve la vida y la familia natural.

El no estar de acuerdo con las preferencias sexuales de otros no nos hace homofóbicos ni promotores del odio.

La iniciativa que se propuso al Congreso violenta los derechos de las familias heterosexuales.

TAMBIÉN DECLARAMOS QUE:

Estamos a favor de un marco jurídico que garantice a los colectivos de diversidad sexual su derecho al desarrollo pleno de sus relaciones, sin que esto lesione y vulnere los derechos de quienes vivimos naturalmente la vida heterosexual.