EDITORIAL

EL PADRE Y EL PASTOR: UN MISMO MES PARA HONRARLOS

Junio es el parteaguas de cada año, y se lo ha elegido para dar reconocimiento a dos figuras determinantes en la formación de una persona, y en particular de un creyente en Jesús: el padre, como sacerdote del hogar; y también se reconoce el trabajo del pastor -por lo menos en la Iglesia Metodista de México así es- como sacerdote de la congregación.

Dios se nos presenta como Padre, y Jesucristo nos enseñó a llamarlo así. Nuestra sociedad necesita de padres, figuras que afirmen la identidad de sus hijos, y les impulsen a lograr metas en sus vidas. Es cierto, la figura materna da un sentido de ser y seguridad afectiva a los hijos; pero es el padre quien confirma en ellos la seguridad de ser mujeres o varones -según el caso- y es debido a la ausencia de figuras paternas que hay tantas personas confundidas en cuanto a su identidad como hombres o mujeres. A las personas que afirman “estar en el cuerpo equivocado”, habría que preguntarles cómo ha sido la relación con las figuras paternas que tuvieron en su etapa de formación, y allí se encontrarían en gran medida los orígenes de las confusiones conocidas como “disforia de género”: el doctor Andrew Comiskey (Comiskey) y el doctor David A. Seamands (Seamands) así lo afirman. Incluso resulta curioso cómo la comunidad LGBTQ ha decidido escoger precisamente el mes de junio para buscar visibilizarse más; nos preguntamos si esta decisión, aparte de la explicación histórica que se dé, no será porque sus miembros anhelen la confirmación de un padre -aunque no lo quieran reconocer- o quieran “debilitar” la atención y el honor a los padres, porque en sus vidas les hizo falta uno cuando estaban en desarrollo.

El Día del Padre se empezó a celebrar el 19 de junio de 1909 en los Estados Unidos, por iniciativa de una mujer llamada Sonora Smart Dodd, buscando que así como había una celebración a las mamás, la hubiera también para los padres; esto recordando al suyo propio, Henry Jackson Smart, el cual la había criado a ella y a sus hermanos a la muerte de su madre. En 1924 se establece el Día Nacional del Padre en Estados Unidos, y en 1966 se define que sería el tercer domingo del mes de junio. Por influencia cultural se empieza a celebrar en México en la década de los años 50 (“dia del padre”).

Por otro lado, el Día del Pastor y del Ministerio Cristiano recibe diversas explicaciones para su origen. En nuestra Iglesia Metodista de México se celebra el 25 de junio de este año (“Calendario – IGLESIA METODISTA DE MEXICO A.R.”) y el propósito de esta fecha es reconocer el trabajo de quienes han tomado el reto de velar por el desarrollo en Cristo de los miembros de una congregación. Este día se reconoce no sólo el trabajo pastoral, sino en general el de todas aquellas personas que desarrollan algún servicio para la edificación del Cuerpo de Cristo, aquellos que han dicho al Señor “Heme aquí, envíame a mí”. Todos los creyentes en Jesús hemos tenido la referencia en nuestra vida de alguien que nos ha ayudado en nuestro caminar, y en particular como miembros de una congregación: el pastor, palabra usada por el Señor Jesús para referirse a sí mismo. Al no encontrar una fuente confiable que nos permita definir el origen de esta celebración, dejamos pendiente este tema, invitando a nuestros lectores a que nos compartan cualquier dato que pudiera ser útil para aclararlo.

Este número tiene interesantes reflexiones, una sobre el trabajo pastoral -”Un ejemplo que sí es posible”- y otra sobre la itinerancia metodista -”La itinerancia: un don para la salud de la congregación”-, que les animamos a leer, comentar y compartir. De igual manera, con gusto presentamos la historia de nuestros seminarios metodistas en México: el Seminario Juan Wesley y el Seminario Dr. Gonzalo Báez-Camargo, que motivan a agradecerle a Dios por estas instituciones de formación ministerial.

“Libertad condicional” es un escrito para meditar sobre los alcances de nuestra propia libertad, y lo pueden leer en esta misma edición. Otro tema interesante es la búsqueda de “recetas” para compartir a Cristo, en el artículo “¡No hay recetas!”. Y ¿qué es la violencia vicaria?: esto lo sabremos al leer la sección de noticias de la Universidad Madero, una de nuestras escuelas metodistas.

Dios es nuestro Padre y nuestro Buen Pastor. Y sin importar cuáles hayan sido nuestras experiencias con padres o pastores en el sentido humano, siempre podemos llenar nuestra necesidad de estas figuras yendo a Su presencia, con la confianza de que nunca nos echará fuera.

Sinceramente,
María Elena Silva Olivares

Referencias

“Calendario – IGLESIA METODISTA DE MEXICO A.R.” IGLESIA METODISTA DE MEXICO A.R., https://iglesia-metodista.org.mx/my-calendar/. Accessed 14 June 2023.

Comiskey, Andrew. Tras la integridad sexual. Anaheim, CA, Desert Stream, 2000.

“dia del padre.” Instituto Nacional de las Mujeres, http://cedoc.inmujeres.gob.mx/documentos_download/101143.pdf. Accessed 14 June 2023.

Seamands, David A. “La curación de los recuerdos.” dokumen.tips, Libros CLIE, file:///C:/Users/malen/Downloads/Seamands_D_A_La_Curacion_De_Los_Recuerdo.pdf.