¿Para qué votar?
Estamos en el umbral de las elecciones más grandes de la historia de nuestro país. El día 2 de junio, de acuerdo con el Instituto Nacional Electoral, más de 98 millones de mexicanos habremos de ir a las casillas electorales para definir con nuestro voto quiénes ocuparán más de 20 mil cargos de elección popular. En la soledad de una casilla, cada uno elegirá a quienes, según su criterio, deban ocupar los puestos de presidente, gobernadores, senadores, diputados federales, diputados locales, alcaldes y otros puestos auxiliares.

No es nuestra intención hablar a favor de tal o cual candidato o partido político; pero sí queremos exhortar, animar, invitar a cada lector a ejercer ese derecho callado, pero efectivo, del voto. ¿Para qué votar, o por que votar?: entre otras razones, porque:
- Como creyentes, creemos que no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay han sido establecidas por Dios. Entonces, si nuestro papel en esta tierra es extender el reino de Dios, debemos hacer lo que nos corresponda para el extendimiento de ese reino, entre otras cosas eligiendo a quienes, en oración, creemos que el Señor desea estén en autoridad.
- Lo que para nosotros es algo habitual, para nuestros antepasados llegó a ser algo inalcanzable en algunas etapas de nuestra historia; así que debemos apreciar el esfuerzo de generaciones anteriores y preservar con nuestro voto ese legado.
- Es mucho el esfuerzo desplegado por un ejército de ciudadanos al organizar estas elecciones, como para que por negligencia lo tiremos a la basura con nuestra negativa de ir a votar.
- Cada papeleta representa una mano alzada a favor de un ciudadano que, como nosotros, vive y labora en México y confiamos que tenga el deseo de servir a otros. No usar nuestras boletas electorales es bajar la mano y quitarle a ese(a) candidato(a) la posiblidad de servirnos en un cargo público.
- Las boletas que me corresponden y que dejo de usar, son balones al aire que alguien del equipo contrario puede utilizar indebidamente.
- Al votar, tenemos el derecho de pedirle cuentas a aquellos candidatos que hayan sido electos, acerca del desempeño que tengan en sus cargos. Si no votamos, no deberíamos quejarnos del desempeño de malos funcionarios.
- Porque el único partido al que nadie debe pertenecer, es el partido del abstencionismo.
- Para afirmar, ante quienes quieren por la violencia alterar el proceso electoral, que somos muchos más los mexicanos pacíficos que los violentos, y que el destino de México, como dice nuestro Himno Nacional, “por el dedo de Dios se escribió”.
Una gran cantidad de los más de 98 millones de votantes inscritos -98,329,591en total- son jóvenes. Estas son las cifras del INE (Presentación De PowerPoint, 2024):
- Entre 18-19 años: 3;572,581
- Entre 20-24 años: 11;330,722
- Entre 25-29 años: 11; 156,315
Esperamos que todos esos jóvenes puedan ejercer libremente su derecho al sufragio, y que las personas mayores -el resto del padrón electoral- también lo hagamos.
En este número de El Evangelista Mexicano encontraremos artículos de historia, testimonios de vida y reflexión en torno a la labor de nuestros laicos, y sobre temas como el discipulado integral y la forma de llevar nuestra adoración comunitaria, entre otras colaboraciones. Invitamos a que los lean, y expresen sus comentarios para nuestros autores, que siempre serán recibidos con respeto y agrado.
“Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el Seol, adonde vas, no hay obra, ni trabajo, ni ciencia, ni sabiduría” (Eclesiastés 9:10). Que en la jornada electoral, y aún después, hagamos todo lo que nos venga a la mano por hacer; Dios seguramente hará el resto.
Respetuosamente,
María Elena Silva Olivares
Referencia
Presentación de PowerPoint. (2024, May 12). Repositorio Documental. Recuperado el 30 de mayo, 2024, de https://repositoriodocumental.ine.mx/xmlui/bitstream/handle/123456789/153578/Numeralia-PEF-2023-2024.pdf
