COMUNICADO DEL GABINETE GENERAL DE LA IMMAR

COMUNICADO DEL GABINETE GENERAL DE LA IMMAR

SITUACIÓN MIGRATORIA 

En el contexto del reciente cambio de poderes federales en los Estados Unidos de América (EUA), ante el inicio de la nueva administración y en vista de la política migratoria anunciada por el gobierno recién inaugurado, la Iglesia Metodista de México, Asociación Religiosa (IMMAR) manifiesta lo siguiente:

Primero, que la migración es un fenómeno complejo, en el cual se combinan factores sociales, económicos, políticos, de seguridad y geográficos diversos. Por tanto, no es posible presentar soluciones simples o reducir el tema a una sola causa. Mientras el ser humano subsista en este planeta, la migración continuará presente. 

Segundo, la mayoría de los migrantes son personas honestas y trabajadoras, que abandonan su hogar por motivos -muchas veces- ajenos a ellos, en busca de la prosperidad, el desarrollo económico, la estabilidad o la seguridad que no han encontrado en sus países de origen. Por tanto, rechazamos cualquier generalización que pretenda catalogar a todos los migrantes como delincuentes o criminales.

Tercero, cada país tiene derecho a establecer y aplicar las leyes que considere necesarias para garantizar la paz, estabilidad y seguridad en su territorio, pues esa es la función esencial de cualquier gobierno. 

Cuarto, la coherencia y la congruencia indican que un país fundado en la tradición cristiana debería llevar a sus leyes, instituciones y políticas la misericordia, la compasión y el amor por el prójimo presentes en el Evangelio, sin que esto suponga un conflicto necesario e inevitable con la misión y responsabilidades del gobierno para sus ciudadanos. 

Quinto, en uso de sus atribuciones y facultades legales, la nueva administración federal de los EUA ha anunciado una serie de medidas, acciones y políticas en materia de migración, entre ellas “deportaciones masivas” que, según palabras del propio gobierno, tendrían como objetivo 1 millón de personas al año. 

Sexto, se estima que en los Estados Unidos de América viven 45 millones de migrantes, de los cuales la tercera parte (15 millones) son de origen mexicano. Adicionalmente, se calcula que, de los 11 millones de migrantes en situación irregular, 4 millones son mexicanos. Por ello, de actualizarse las medidas anunciadas, indudablemente nuestro país recibiría en su territorio a buena parte de los migrantes deportados.

En virtud de lo anterior, la IMMAR llama a cada integrante de las iglesias metodistas, y a los cristianos de todas las denominaciones y congregaciones, a sumar esfuerzos para apoyar y atender los problemas que, sin duda, se presentarán en el territorio nacional derivado de esas medidas.

Recordemos que, en nuestra experiencia como cristianos, somos llamados a proteger, acompañar y caminar junto con los débiles, los vulnerables y los desprotegidos, entre los cuales se encuentran los migrantes. En ello reconocemos que la condición de migrante no nos hace distintos delante de Dios; por tanto, ninguna persona o gobierno debe tener prácticas de abuso o discriminación con nuestros hermanos que transitan dentro o fuera del país. Observemos lo que enseña la Escritura: “Entonces tú también debes amar al inmigrante, porque fuiste inmigrante en la tierra de Egipto” (Deuteronomio 10:17).

Por ello, exhortamos a los miembros de la IMMAR e invitamos a nuestros hermanos de todas las iglesias que forman el Cuerpo de Cristo para apoyar -con recursos, tiempo, dinero y con sus oraciones- a los albergues e instituciones para atender migrantes establecidos por la iglesia metodista a lo largo del territorio y las fronteras nacionales. 

Lo anterior, como una muestra del auténtico espíritu del metodismo y como manifestación del pensamiento profundamente cristiano de Juan Wesley, cuyas palabras, hoy más que nunca, deben ser recordadas: “no predicar el evangelio a estómagos vacíos”

GABINETE GENERAL DE LA IGLESIA METODISTA DE MÉXICO, A.R.