La Trinidad: un ejemplo del legado hispano al metodismo unido
Por Rev. Gustavo Vasquez *
15 de octubre de 2025 | Noticias MU

Desarrollar ministerios entre las comunidades más vulnerables es un gran reto de fe. La pobreza, la discriminación racial, el desarraigo, el sectarismo religioso, la segregación y muchos otros elementos son adversidades que los ministerios hispano-latinos tienen que enfrentar para conformar comunidades de fe.
La Iglesia Metodista Unida La Trinidad en la población de Seguin, Tejas, es un ejemplo de fe, perseverancia y fidelidad en seguimiento de los valores del evangelio y el discernimiento wesleyano en su doctrina y tradición ministerial.
Con 120 años de historia, la IMU La Trinidad ha sido el hogar de 5 generaciones de metodistas unidos/as que se han formado para dar testimonio de su compromiso poniendo al servicio del metodismo unido sus talentos y capacidades.
En tiempo como los actuales, cuando se ha difundido una narrativa basada en la mentira y la manipulación política que agrede y denigra, no solo de la población inmigrante, sino a la comunidad hispano-latina en general, ejemplos como el que ha dado La IMU La Trinidad son una inspiración para resistir las adversidades y seguir impulsando la misión de la iglesia en todas partes.

En julio de 2025, la IMU La Trinidad de Seguin celebró 120 años de historia, con una celebración que reunió cerca de 200 personas para honrar y reconocer el aporte de muchas familias que han hecho de esta iglesia, una de las pocas iglesias hispanas de la denominación con un historial de tantos años y que sigue siendo una referencia en la sociedad y la denominación.
La Obispa Cynthia Fierro-Harvey expresó durante la celebración aniversaria, que la IMU La Trinidad “ tiene una gran importancia para nuestra conferencia anual (Río-Tejas), ya que representa un hito fundacional, sobre el cual varias generaciones de líderes de nuestra iglesia se han formado; gente que han servido, no solo en iglesias hispanas, sino en el resto de la denominación”.
“En estos tiempos difíciles para la comunidad hispano-latina dentro y fuera de la iglesia, esta congregación es un símbolo de lucha, fidelidad y resistencia”, recordó la Obispa Fierro-Harvey, quien es líder episcopal de las conferencias anuales de Tejas y Río-Tejas de La Iglesia Metodista Unida. La Trinidad pertenece a la Conferencia Anual de Río-Tejas, la cual nació de la fusión de las conferencias de Río Grande (la única estructura conferencial integrada por congregaciones hispanas en la denominación) y del Suroeste de Texas en 2015. Esta fusión ha sido un desafío, al igual que el desarrollo de nuevos ministerios y congregaciones hispanas en el área.

La Trinidad, ejemplo de perseverancia
Pocas son las iglesias hispano-latinas que pueden celebrar una trayectoria ministerial tan extensa y rica como La IMU La Trinidad. La nutrida historia centenaria de esta congregación, contrasta con escaso impacto y la poca relevancia que ha tenido el metodismo unido en la comunidad hispano-latina donde apenas el 1.3% de la denominación tiene este origen étnico-racial, de acuerdo a estadísticas de GCFA (Junta General de Finanzas y Administración de La Iglesia Metodista Unida).
Al igual que otras denominaciones protestantes el desarrollo de ministerios entre minorías étnico raciales ha sido insignificante. De acuerdo con un informe del Instituto Hartford para la Investigación Religiosa del 2023 y publicado por la Iglesia Católica-Romana, apenas el 4.4% de la población hispano-latina en EE.UU. asiste a iglesias protestantes. Estos números evidencian la dificultad que tienen iglesias que responden a patrones socioculturales y tradiciones propias de la cultura caucásica y anglo-parlante.
Sin embargo, son muchas las personas que han visto, a lo largo de la historia, la necesidad de ministrar en igualdad de condiciones a comunidades de diferentes contexto social, étnico y racial, superando las limitaciones económicas, las barreras lingüísticas, culturales, la inestabilidad legal de las comunidades inmigrantes y otros factores que dificultan la misión entre grupos como la población hispano-latina.
Oralia Herrera es la historiadora de La Trinidad y se ha dedicado a recopilar información, testimonios, fotografías y documentos que recrean la historia de esta congregación: “El primer edificio que tuvo la iglesia fue cedido a la comunidad hispana por la Iglesia Metodista Episcopal Alemana, después de un periodo en el cual los congregantes estuvieron reuniéndose en sus casas, porches y parques públicos en 1864”.
Este primer edificio ubicado en los lotes de terreno 7 y 8 de la ciudad de Seguin, Condado de Guadalupe en Tejas reunía a una comunidad de primera y segunda generación de tejanos de origen mexicano, con el apoyo del Rev. Frank Scovill Onderdonk quien fue ministro de la Iglesia Metodista Episcopal del Sur en 1892.
Onderdonk sirvió Méjico como misionero en San Luis Potosí y como pastor en iglesias de Ciudad de México y Guadalajara antes de ser designado director de las misiones metodistas mexicana, italiana y bohemia en Tejas. De acuerdo con Oralia Herrera el trabajo de Onderdonk “fue fundamental para establecer el ministerio para la comunidad hispanohablante. (El) Trabajó intensamente con las familias y la comunidad, de lo cual hay muchas fotos que documentan esta hermosa labor”. Este es un ejemplo de los/as muchos/as líderes metodistas que han comprendieron la necesidad de abrazar la diversidad racial, étnica y cultural, como una riqueza y no como un riesgo para la vida de la iglesia.
La historia de la IMU La Trinidad, ilustra Las luchas para hacer misión en medio de contextos de segregación, pobreza, racismo e intolerancia.

En 1905 bajo el liderato pastoral del Rev. Basilio Soto, se estableció formalmente la Iglesia Metodista Unida La Trinidad. Soto nació en Laredo, Tejas, en 1858 y llegó a ser uno de los predicadores metodistas hispanos más reputados del estado. La Conferencia de Texas lo recibió en 1881 y más de dos décadas después se convirtió en el primer pastor de la nueva iglesia La Trinidad.
“Esta iglesia inicialmente sirvió a inmigrantes mexicanos/as y jugó un papel importante en la construcción de la comunidad hispana en el estado de Tejas”, recordó Oralia Herrera. Actualmente es una referencia en la ciudad de Seguin por el servicio que ha brindado a la comunidad por más de 5 generaciones.
Herrera recuerda que Seguin ha tenido una larga historia de segregación: ““La vida social era muy limitada debido a la segregación. La gente socializaba principalmente dentro de su propia comunidad. Cada grupo étnico tenían una escuela diferente, vivían en diferentes vecindarios, piscinas y parques por separado, por lo que las congregaciones no tenían mucha relación entre sí. Desde entonces, las cosas han cambiado. Aunque aún quedan algunos vestigios de segregación.

El Rev. Dr. David Maldonado, quien creció y se formó en esta iglesia y posteriormente ocupó importantes cargos en instituciones educativas como Seminario Iliff donde fue presidente entre los años 2000 y 2004, recuerda en uno de sus libros la segregación en Seguin y los ataques que recibía cuando tenía que cruzar los vecindarios para llegar su escuela: “Crecer como metodista mexicano-estadounidense en un pequeño pueblo del sur central de Tejas durante las décadas de 1940 y 1950 significaba ser una minoría dentro de otra minoría”, dice en la presentación de su libro Crossing Guadalupe Street: Growing up Hispanic and Protestant (Cruzando la calle Guadalupe: Creciendo hispano y protestante).
Maldonado destaca en sus escritos, que la comunidad hispana metodista, no solo tenia que enfrentar el racismo, la discriminación y la segregación de la raza dominante, sino también la intolerancia religiosa, dentro de la propia comunidad hispana, por el hecho de ser protestantes y no católico-romanos como la mayoría.

Vivir siendo “una minoría dentro de la minoría” forja el carácter y la capacidad de resistencia y resiliencia que ha caracterizado a muchos ministerios hispano-latinos (y de otras minorías), dentro de la denominación y en la sociedad en general. En medio de un contexto adverso las comunidades minoritarias abrazan su fe, su cultura y su identidad para poder sobrevivir y crecer.
A lo largo de su ministerio, La Trinidad ha organizado y promovido programas de beneficio para las comunidades en necesidad como: distribución de material escolar, alimentos y otros artículos de primera necesidad. Además, a través de actividades de encuentro y socialización durante días festivos y diferentes épocas del año, La Trinidad se constituyó en un espacio de encuentro y fortalecimiento del tejido social para una ciudad históricamente segregada como Seguin.
“Esta iglesia se ha ganado el respeto y el aprecio de las propias autoridades de la ciudad, por el papel que ha jugado a lo largo de su historia y hoy es considerada una de las iglesias hispanas más relevantes de Seguin”, según Oralia Herrera.
Actualmente, las instalaciones de la iglesia ofrecen espacio para el uso público como un jardín abierto a la comunidad para la oración, el descanso y la meditación, así como la “Casa Wesley” que ofrece actividades y programas escolares para los/as niños/as de la comunidad.

El púlpito de La Trinidad ha escuchado la predica de 37 pastores/as a lo largo de su historia. Herrera recuerda que “a lo largo de los años, algunos/as recibieron buenas reseñas y otros no, pero siempre hemos tenido una transición al liderato pastoral ininterrumpida”.
Varios han sido los lideres clericales y laicos que han servido en la iglesia y a lo largo de la denominación. Tal vez el mas conocido es el Obispo Joel Martínez, el segundo obispo de origen hispano de La Iglesia Metodista Unida, quien creció junto a su familia y se formó en La Trinidad.
El Obispo Martínez está jubilado actualmente y, además de ser pastor y superintendente, ocupo diversos cargos de liderato dentro de la denominación como la presidencia de GBGM y del Comité Nacional de Coordinación de Prioridades Misionales, la secretaria ejecutiva de la Oficina de Ministerios Étnicos y Lingüísticos, entre muchas otras responsabilidades. Además, trabajo de cerca con Cesar Chávez en los an1os 70 y fue miembro fundador del caucus hispano-latino (MARCHA) de La Iglesia Metodista Unida y presidió el Comité Nacional del Plan Nacional para los Ministerios Hispanos .
Martínez fue uno de los oradores en la celebración del 120mo aniversario de la Iglesia Metodista La Trinidad. En su discurso hizo una recopilación con los nombres de personas y familias enteras que por seis generaciones han participado en la vida de esta comunidad de fe y fue enfático en afirmar “el futuro de la iglesia, no está en los pulpitos sino en las bancas y en las sillas, en la vida cotidiana de la gente.

La Revda. Nohemí Ramírez fue pastora de esta congregación desde el 2020 hasta mediados del 2025 y ahora atiende otra de las iglesias hispanas históricas de la denominación (cumplirá 150 años de ministerio en 2026), que tiene el mismo nombre, La Trinidad, pero está ubicada en la ciudad de San Antonio dentro del mismo estado de Tejas.
Ramírez recuerda los altibajos que ha tenido la iglesia, especialmente después de la pandemia del COVID-19 que afectó mucho la vida de la iglesia: “esta situación cambió la vida de la iglesia. Las dificultades para reunirnos de manera presencial afectaron mucho a una iglesia como ésta, donde hay un sentido de familia muy arraigado”.
El impacto de pandemia en las iglesias y ministerios raciales étnicos, ha sido mucho más profundo y difícil de superar. La vulnerabilidad económica de la comunidad hispano-latina, se convirtió en un factor de riesgo para una población que no podía permanecer en sus casas para poder sobrevivir, y por el otro lado, provocó la movilización de la gente y la desarticulación de las comunidades, ya que tuvieron que buscar mejores oportunidades de ingreso y de trabajo.
Según los datos más recientes del Censo de 2024 y el Pew Research Center (Centro de Investigaciones Pew), el ingreso promedio de la población hispana en EE.UU. está por debajo del promedio nacional, solo por encima de la comunidad afroamericana.
Otra de los grandes desafíos que ha tenido que vivir la IMU La Trinidad y muchas otras congregaciones hispano-latinas fue la separación de muchos de los miembros que se fueron de la iglesia, después de las decisiones tomadas en torno a la sexualidad humana dentro de la denominación. La tradición, la perspectiva teológica y la cultura del pueblo hispano-latino en los EE.UU. se han visto confrontadas por los cambios aprobados.
Según la Revda. Ramírez “una buena parte de la congregación se fue de la iglesia, por la confusión y la desinformación que se produjo en ese periodo, en el cual la iglesia no conto con el liderato pastoral adecuado. Nos tocó hacer una labor de reeducación y conciencia que permitió la estabilidad y la consolidación de nuestra identidad denominacional y ahora podemos decir que somos una iglesia de puertas, brazos y corazones abiertos”.

Alrededor del 25% del total de las iglesias de la denominación, se desafiliaron desde el 2019. El porcentaje de iglesia hispano-latinas que salieron de La Iglesia Metodista Unida fue del 16%, de acuerdo a las estadísticas de WESPATH, la agencia que administra planes de jubilación, fondos de inversión y beneficios de La Iglesia Metodista Unida.
Como consecuencia de ese proceso la Primera IMU de Seguin, con una membresía mayormente caucásica anglosajona, se desafilió y los/as miembros que decidieron permanecer en la denominación, conformaron la IMU de Walnut Spring. Esta naciente iglesia ha recibido un gran apoyo de La Trinidad, la cual les ha hospedado y en la actualidad comparten las instalaciones todos los domingos. Ambas iglesias conviven y comparten las instalaciones, lo que constituye un ejemplo de apertura y hermandad. Tradicionalmente son los ministerios hispano-latinos (al igual que otras minorías raciales étnicas), las que son recibidas por iglesias blancas y les facilitan el uso de algunas áreas de sus templos. Pero esta experiencia es a la inversa y constituye un buen ejemplo de que las minorías étnico-raciales también tienen mucho que dar y compartir con los sectores étnicamente mayoritarios de la iglesia.

Los desafíos del ministerio hispano-latino
En medio de un clima social de hostilidad creciente con la comunidad inmigrante y la comunidad hispano-latina en general, se corre el riesgo de que el racismo social e institucional se acentúe.
Buena parte de los ministerios hispano-latinos (al igual que los ministerios entre otras minorías étnico raciales), deben estar constantemente demostrando la relevancia y la importancia de poder ministrar a las minorías. Ser considerados en algunos círculos como un ministerio accesorio o no esencial, es parte de las expresiones de racismo institucional y segregación que aún se siguen presentando dentro de muchas iglesias protestantes y de otras tradiciones.
Actualmente La Trinidad esta pastoreada por el Rev. Federico “Fred” Pérez Jr., quien es nativo de El Valle, Tejas, y fue instalado el pasado 6 de Julio. Pérez tiene 12 años de experiencia pastoral y viene liderar la Primera Iglesia Metodista Unida de La Feria en el mismo estado.
La Iglesia La Trinidad es uno de los ejemplos de perseverancia y reivindicación de la herencia histórica y cultural de la comunidad hispana en el metodismo. Esta congregación ha expandido la presencia metodista en su localidad, ha sobrepasado dificultades y crisis institucionales de la denominación, ha provisto lideres para denominación en varias áreas, ha confrontado la segregación y el racismo, ha superado las limitaciones de la pobreza y los obstáculos interculturales y después de 120 años sigue enriqueciendo al metodismo unido con su testimonio
Fuente: https://www.umnews.org/es/news/la-trinidad-un-ejemplo-del-legado-hispano-al-metodismo-unido
Lutero en el cine
El cine nos muestra su figura, a lo largo de los años, con distintos resultados, pero una misma fascinación.
28 DE OCTUBRE DE 2025 · 10:15

La víspera del Día de Todos los Santos –que es lo que significa Halloween–, el 31 de octubre de 1517, un joven monje agustino publicaba noventa y cinco tesis, en la Universidad de Wittenberg (Alemania). La lucha de este hombre contra el poder religioso inicia una Reforma, que continúa hasta el día de hoy. El cine nos muestra su figura, a lo largo de los años, con distintos resultados, pero una misma fascinación.
Hans Kyser era un guionista alemán que trabajó con directores como Murnau o Pabst. Como escritor, tenía una particular inclinación por la adaptación de sucesos y personajes históricos. La única película que dirigió era Lutero (1928). El reformador aparece así en el cine mudo con una obra de cierto presupuesto y gran dirección artística. Los decorados, el vestuario y los efectos especiales son espectaculares. No así la dirección de actores, que en general tienden a la sobreactuación o a ser tan inexpresivos como una figura de cera. La atmósfera está bien lograda y es correcta técnicamente, pero el resultado es algo monótono. La copia que se puede ver actualmente tiene subtítulos y una voz americana de fondo, que comenta aspectos de la vida de Lutero, ¡así que ya no es cine mudo!
En la época sonora, Lutero es un personaje de una película alemana de 1939, que se conoce en inglés como El corazón inmortal. La hizo el director Veit Harlan con Bernhard Minetti en el papel del reformador, pero no será hasta 1953 que se hace realmente la mejor película sobre Lutero. Es una coproducción americana con Alemania, dirigida por Irving Pichel, que se rueda en el país del reformador con el actor irlandés Niall MacGinnis como protagonista. Los amantes del cine de terror recuerdan siempre a MacGinnis por su papel del ocultista Karswell, en el clásico de Jacques Tourneur, La noche del demonio (1957). En la edición que se ha hecho en DVD por el cincuenta aniversario, Robert Lee cuenta la historia completa del film.
Un clásico nominado al Oscar
Irving Pichel era actor y director desde los años treinta. Había comenzado en el teatro, pero llega a California con el comienzo del sonoro, a finales de los años veinte. Había sido guionista para la Metro, pero pronto destacó en papeles como Fagin de Oliver Twist o el mayordomo de La hija de Drácula. Su primera película es un film de terror para la RKO, El malvado Zaroff, en 1932. Debido a su asociación con varios sospechosos de comunismo durante los años cuarenta –como Abraham Polonsky–, en la revista The Hollywood Quarterly, es llamado a declarar por McCarthy en la caza de brujas. Se logra librar de la lista negra y puede así trabajar en todo tipo de películas, desde musicales (Dance Hall) a filmes de aventuras (O.S.S.), cine negro (Ellos no creen en mí), ciencia-ficción (Con destino a la luna) o adaptaciones de Steinbeck (Donde nacen los héroes). Es también el narrador de míticas películas de John Ford, como La legión Invencible o ¡Qué verde era mi valle!
Pichel hace la película de Martin Lutero justo después de rodar un western con Randolph Scott, Santa Fe. Fue la penúltima película antes de morir de un ataque al corazón el año siguiente. Pichel ya tenía experiencia en otros proyectos cristianos, puesto que había colaborado con el pastor episcopal Friedrich y sus Cathedral Films para escuelas dominicales, en dos grandes producciones que llegaron a los cines: El gran mandamiento (1939) y Día de triunfo (1954). Esta segunda fue de hecho la última que dirigió, para la que contó con actores de la talla de Lee J. Cobb y Joanne Dru.
La película de 1953 tiene dos nominaciones para el Oscar por la excelente dirección artística de dos alemanes (Fritz Maurischat y Paul Makwitz) y la impresionante fotografía en blanco y negro del francés Joseph Brun. Es una buena película, que merece la pena revisar, en cierto sentido superior a la versión actual. Un auténtico clásico, que debería tener una mejor distribución que la hiciera accesible a un público general.
El año 74, vuelve Lutero al cine, interpretado por Stacey Keach, veterano actor de televisión, conocido sobre todo por su papel protagonista en series tan populares como la del detective Mike Hammer en los años ochenta o Prison Break (donde interpreta el papel del alcaide). La obra de teatro de John Osborne nos muestra a un sorprendente Lutero, casado aquí con Judy Dench, que hace el papel de Catalina de Bora. La obra del autor de Mirando hacia atrás con ira, que llevó al escenario Albert Finney, resulta en la versión de Guy Green demasiado teatral. No hay nada del asombro y la alegría que despierta el redescubrimiento del Evangelio, tan poderosamente capturado en la última película que se ha hecho sobre Lutero.

La película de 1953 tiene dos nominaciones para el Oscar por la excelente dirección artística de dos alemanes y su impresionante fotografía en blanco y negro del francés Joseph Brun.
El joven reformador
La película más fácil de encontrar ahora en plataformas o en DVD, es la última versión que se ha hecho en el cine sobre la vida de Lutero (2003). Muchos tienen así la oportunidad de ver esta producción de habla inglesa, en la que el reformador aparece ante el gran público con el atractivo de un joven asombrado por el poder liberador de la Palabra de Dios. El protagonista de Shakespeare In Love, Joseph Fiennes, resalta su fragilidad con una humanidad lejos de la figura monstruosa que ha fabricado de él la leyenda negra. Por eso, quien piense que la Reforma no es más que cuestión de política y crea que Lutero no fue sino un mero instrumento de los príncipes alemanes contra los campesinos, no reconocerá al personaje que tiene delante en la pantalla. Ya que en esta historia hay más Evangelio que en toda La Pasión entera de Mel Gibson. Porque el tema de esta película es en realidad la gracia de Dios, que nos revela a un Padre amante y lleno de misericordia.
La película arranca con la ya mítica tormenta por la que Lutero decide hacerse monje en Erfurt en 1505, a pesar de la oposición de su padre. Es allí donde conoce al vicario general de los agustinos en Alemania, Staupitz, magistralmente interpretado por el actor suizo Bruno Ganz, que tantas grandes películas hizo en el nuevo cine alemán con directores como Wim Wenders. Su habitual papel contenido adquiere aquí un singular dramatismo en este interesante personaje, que ha venido a ser prototipo del catolicismo-romano más filo-protestante, siempre tan cerca, pero a la vez tan lejos de la Reforma. Para él, como para tantos católicos hoy, el problema del protestantismo es que no ve lo positivo que todavía hay en la Iglesia de Roma, aunque le recomienda a Lutero leer la Biblia cada día, mandándole a Wittenberg para estudiar.
La famosa visita de Lutero a Roma ha sido rodada en Italia misma por Eric Till –director británico, afincado en América, que ha hecho hace poco una película sobre Bonhoeffer–. Se detiene allí en el inmenso circo, en que se ha convertido la religión papista. Esta experiencia deja a Lutero escandalizado ante semejante espectáculo de manipulación, superstición e inmoralidad por parte del clero. Es esa pompa y lujo vaticano la que lleva a León X a hacer una venta masiva de indulgencias, que es mostrada en la película con todo detalle y exactitud histórica. Pero esta denuncia de la corrupción, lejos de verse como algo anacrónico, muestra una actualidad singular por su enfrentamiento contra toda tiranía y opresión espiritual. En ese sentido las noventa y cinco tesis de Lutero contra el comercio vaticano, no sólo inician un proceso de Reforma de la Iglesia el 31 de octubre de 1517, sino que siguen siendo una denuncia contra todo tipo de corrupción religiosa.

El protagonista de Shakespeare In Love, Joseph Fiennes, muestra la fragilidad de Lutero con una humanidad lejos de la figura monstruosa que ha fabricado de él la leyenda negra.
La Palabra liberadora
El mensaje de Lutero va más allá que una mera declaración del valor de la libertad de conciencia. Pocas veces en el cine se ha visto un tratamiento tal de la Biblia como algo emancipador para el hombre. Cuando tantos identifican hoy el cristianismo bíblico con fundamentalismos e integrismos religiosos, basados en un fanatismo peligroso, Lutero nos presenta la Palabra de Dios como una fuerza liberadora. Ya que entender que la autoridad del Papa no está por encima de las Escrituras, ni que los Evangelios pueden ser negados por las palabras de los hombres, lleva a una fe que ya no está basada en el consuelo, sino en la verdad misma. Es por eso que Lutero se niega a arrodillarse ante la autoridad de Roma, que representa el cardenal Cayetano, porque su conciencia está ahora “cautiva de la Palabra de Dios”.
Es interesante también el papel que tiene la política en la Reforma. El apoyo del príncipe Federico el Sabio –interpretado aquí por un Peter Ustinov a punto ya de fallecer, pero lleno de una sabiduría e inteligencia que ya quisieran tener muchos actores jóvenes– hace posible la traducción de la Biblia. Es esta obra la que realmente produce la Reforma, pero también el redescubrimiento de la experiencia de gracia de Lutero. Aunque ese apoyo de los príncipes en Augsburgo, con el que se cierra la película, se convierte en “el abrazo del oso” con la guerra contra los campesinos. Es ahí donde vemos las consecuencias prácticas de la visión de Lutero sobre los dos reinos, que divorcia en cierto sentido la realidad espiritual de la temporal.

Lutero nos presenta la Palabra de Dios como una fuerza liberadora.
Gracia asombrosa
Lutero es presentado aquí también como alguien entrañable por su relación con el personaje de una niña minusválida llamada Greta, que aparece a lo largo de toda la película. Es como la afirmación de Jesús de que el Reino pertenece a los niños. Esa compasión de Dios por una criatura indefensa es la que resalta una y otra vez, como cuando entierra al enfermo mental que se ha suicidado en “campo santo”. Es en ese sentido que esta es una historia sobre la gracia de Dios, aunque no se mencione nunca la palabra. Tampoco se habla por cierto de justificación, pero no hay mejor explicación que la que da Lutero en su emotivo sermón, cuando predica entusiasmado por el pasillo de la iglesia de Wittenberg. Ya que una de las virtudes de esta obra es precisamente su lenguaje, capaz de hacer entender las ideas centrales de la Reforma de una forma clara y sencilla, perfectamente comprensible para cualquier espectador.
Ese amor activo es el que destaca al final de la película en el relato evangélico conocido como del hijo pródigo, cuando le explica a los niños que el Padre corre en busca de su hijo. Es la asombrosa gracia de Dios, que se muestra en un hombre como Lutero, con todas sus debilidades, capaz de confesar a su esposa Catalina que hay días que se siente tan deprimido, que ni siquiera se puede levantar de la cama. Es por eso que muchos creemos que la Reforma fue una obra de Dios. Ya que esta no es la historia de un gran hombre, sino de un gran Dios, que ama profundamente a criaturas tan miserables y atormentadas como aquel monje.
Fuente: https://protestantedigital.com/martes/70953/lutero-en-el-cine
México | Alumnos evangélicos no serán obligados a participar en el ‘Día de Muertos’La Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) ha emitido instrucciones a los planteles educativos para garantizar la libertad religiosa de los estudiantes.
Redacción ED
El Diario del Istmo · México · 29 DE OCTUBRE DE 2025 · 12:00
Decoraciones para el Dia de Muertos. Foto de Nick Fewings en Unsplash.
En México, la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) ha emitido nuevamente este año instrucciones a los planteles educativos de ese Estado para que los alumnos cristianos evangélicos no sean obligados a participar en el “Día de Muertos”.
La medida responde a un oficio presentado por la Red Evangélica de Veracruz en el que solicitaron no exigir al alumnado elaborar altares, participar en representaciones típicas de este día, o realizar trabajos alusivos.
En un comunicado, la organización agradeció la pronta respuesta de la SEV y destacó que las indicaciones buscan promover inclusión, diversidad y voluntariedad en todas las actividades escolares.
“Reiteramos nuestro compromiso de seguir trabajando en favor de nuestras niñas, niños y jóvenes cristianos, defendiendo con respeto y firmeza su derecho a vivir conforme a su fe”, resaltó la Red Evangélica.
El año pasado, las autoridades educativas también comunicaron que la participación en estas actividades no era obligatoria.

Día de los Muertos
El Día de Muertos se celebra el 1 y 2 de noviembre, y es una tradición arraigada en muchos países, especialmente en México. Su origen proviene del sincretismo entre las celebraciones católicas (especialmente el Día de Todos los Santos y el Día de los Difuntos) con diversas costumbres de indígenas.
Esta fecha se suele asociar comúnmente con el denominado Día de Brujas o Halloween, aunque son reuniones de diferente origen y tradición.
Para muchas comunidades religiosas, como la evangélica, estas prácticas de culto a los muertos o a lo oculto, contradice las creencias bíblicas.
>
Evangélicos en México
Según el Diario del Istmo, la Encuesta Nacional sobre Creencias y Prácticas Religiosas arrojó que la población evangélica ha experimentado un crecimiento significativo en las últimas décadas.
En 2020, aproximadamente el 11.2% de la población mexicana se identificó como protestante o evangélica, un aumento respecto al 7.3% registrado en 2000.
En el estado de Veracruz, se estima que más de un millón de personas profesan esta fe, lo que representa una proporción considerable de la población estatal.
