IMMAR-CASE
Dto. Suroriental
Crónica del LXXVII Periodo Ordinario de Sesiones
7-8 de Noviembre de 2025
IMMAR “Sinaí” Colonia La Libertad, Puebla.
Crónica

El Templo Metodista Sinaí, ubicado en la colonia la Libertad, en la ciudad de Puebla, abrió sus puertas los días 7 y 8 de Noviembre del presente año para recibir los trabajo del Septuagésimo Séptimo Periodo Ordinario de Sesiones del Distrito Suroriental, presidido por nuestro Superintendente, Pbro. I. Gerardo González Soriano. La jornada inició a las 8:00 hrs con un desayuno y la posterior inscripción de los Administradores y Pastores que representaban a las congregaciones del Distrito Suroriental, Desde el principio, la comunidad nos acogió con alegría y calidez. Los hermanos y las hermanas nos invitaron a entrar al comedor para participar en un desayuno comunitario que representaba la unidad y la hermandad. Los diálogos entre hermanos y amigos comenzaron, rebosantes de esperanza y gratitud, manifestando la Gracia divina que nos convocó. Todo estaba listo para iniciar las sesiones: un templo con la infraestructura necesaria para solventar la actividad, una congregación local llena de amor y dispuesta a compartir con el resto de los asistentes, pastores y laicos listos para trabajar, pero sobre todo la bendición, dirección y guía de Dios en cada momento y en cada actividad.

Siendo las 9:37 se dan por iniciados los trabajos de la Conferencia, a través de un culto donde se participó de la Cena del Señor. Dicho culto, basado en 1 de Juan 1:7, fue dirigido por las presidentas de SMF y LBSC   y su énfasis consistió en fortalecer experiencias de fe en comunidad. 

11:04: se declara el inicio de la primera sesión de trabajo. La lectura del Artículo 181 de nuestra vigente Disciplina nos recuerda el énfasis y propósito de la presente Conferencia de Distrito. El Artículo 191, referente al “orden de asuntos”, es respondido, para este periodo, el Pbro. I. Uzi Castañeda es electo secretario y solicita a la Probando Silhi Chavéz le pueda asistir en las labores de la secretaría. Al pase de lista están presentes un total de 27 miembros ministeriales y 60 miembros laicos; el quórum queda fijado en 58 miembros. También se determinó el alcance de la barra, a los escrutadores, y demás comisiones que trabajan durante este periodo ordinario de sesiones; de parte de la Secretaria se refiere que la información más precisa y detallada se encuentra en el dossier.

Un momentos sobresaliente fue la participación en el Sacramento de la Cena del Señor; un acto que expresa nuestra fe y que muestra nuestra dependencia de la Gracia divina, pero que también reafirma que como la Iglesia de Cristo, encontramos sostén y consuelo en El Señor y expresamos: confianza en que Dios es quien sustenta, provee y dirige a su pueblo llamado Metodista. Un tiempo de reflexión, donde en el pan partido y la copa levantada fortalecemos nuestra unidad con Cristo y con nuestros hermanos, expresando una Comunidad de Gracia cimentada en la Gracia, en el amor y en la esperanza.

Con corazones renovados, dirigidos, e impulsados por el Espíritu Santo, finalizamos este tiempo con la convicción de que Dios guía nuestro camino, dirigiéndonos en el servicio y amor hacia los demás. El Superintendente culminó este instante de adoración recordándonos la importante misión que poseemos como Iglesia, animándonos a llevar su Palabra a cada lugar y a cada vida a nuestro alrededor. 

A través de este diálogo y evaluación por parte de las áreas y comisiones del Gabinete Distrital,  se afianzó el compromiso con directrices claras y con un propósito específico. Enfatizando en aquello que es esencial y primordial para que nuestras iglesias continúen trabajando y entregando resultados favorables, este tiempo finalizó con un llamado a la acción, a que cada congregación trabaje con esfuerzo en la planeación y evaluación de sus actividades, asegurando así una evaluación positiva. Otro tiempo que fue de edificación fue el llamado “Culto del Seminario” a cargo de los seminaristas; en dicho espacio se enfatizó en lo importante que es la preparación bíblico-teológica en la labor pastoral.

Sabíamos que veníamos a una jornada de trabajo arduo, a cumplir con una meta específica, y encontramos una calidad humana tan excepcional. Su hospitalidad ha convertido el esfuerzo en una experiencia gratificante. Gracias por cada detalle, por la logística, por los alimentos compartidos y, sobre todo, por hacernos sentir como en casa. Es inspirador ver cómo una comunidad organizada y generosa puede lograr grandes cosas.

CRONISTA: Pastor Miguel Rojas C.
En la congregación de Panzacola Tlaxcala

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