
Comentario de obispos de la IMMAR sobre reunión con el Secretario General del Consejo Mundial de Iglesias (CMI)
Los días 23 y 24 de octubre, durante la junta del Colegio de Obispos y de Gabinete General, tuvimos la oportunidad de conversar con el Dr. Olav Fykse Tveit, secretario general del Consejo Mundial de Iglesias (CMI), Marcelo Schneider, representante del CMI y Edgar Avitia, representante de la Junta General de Ministerios Globales, quienes viajaron de Ginebra para el encuentro. El tema general del acercamiento versó sobre los temas que llevaron a la suspensión de las relaciones de la Iglesia Metodista de México con esa organización.
Lo primero que abordamos fue la situación vivida durante la VII Asamblea General en Camberra, Australia en el año 1991. Se mencionó que una de las causas de la ruptura de nuestras relaciones con este grupo fue la participación tan determinante que tuvo la Iglesia Católica en esta asamblea. Se les preguntó ¿cuál es la participación de la Iglesia Católica en la actualidad dentro del CMI?
Ellos respondieron que eso depende de la relación que cada país tenga con la Iglesia Católica. El Dr. Olav pregunta ¿qué relación tiene la iglesia Metodista en México con esta iglesia? para poder ver en qué áreas se puede trabajar con ellos. Él nos comentó que en el CMI la Iglesia Católica participa como consejeros y en el área de misiología. A partir del nombramiento del Papa Francisco se ha trabajado de una forma diferente, ya que se ha discutido mucho acerca de teología, en lo cual no se han puesto de acuerdo; pero han buscado más trabajar juntos en lo práctico como el trabajo con las misiones y la ayuda a los necesitados del mundo. Hay una nueva relación con los católicos actualmente en la que están buscando más presentar más a Jesucristo como iglesias a través del trabajo práctico y mostrando la ayuda, que a través de tratar de unirse teológicamente. Menciona que nunca se unirán institucionalmente con ellos, pero que pueden unirse en el trabajo de presentar a Cristo al mundo a través del servicio.
Se les comentó sobre la situación presentada en Camberra, donde hubo danzas y algunos eventos sincretistas. Se les preguntó ¿qué saben ellos de esto? a lo que ellos respondieron que personalmente no estuvieron en Camberra, pero que se ha estado trabajando en llegar a un acuerdo sobre cómo orar y qué liturgia usar en sus eventos para evitar que sean motivos de división. Ellos están conscientes que en aquella ocasión todo esto trajo muchos problemas, pero están trabajando sobre estos asuntos. Ahora están buscando que haya un 95% de representación ortodoxa en las reuniones. No se ha llegado a un consenso en cuanto a la liturgia, pero se está trabajando en eso. Y no se van a tomar decisiones hasta que haya ese consenso.
Ellos comentan que, en cuanto al sincretismo, han aprendido que deben convivir con personas de otra fe. Que no tienen que mezclar su fe con la de ellos, pero sí convivir y compartir el trabajo en cuanto a la ayuda a la humanidad. Consideran que tenemos que cambiar en eso.
Les aclaramos que no solo se trataba del sincretismo, sino que en lo sucedido en Camberra hubo situaciones que pudieran considerarse hasta satánicas. Nuestro propósito es investigar qué es lo que está sucediendo en la actualidad para poder tomar una decisión en cuanto a regresar o no a formar parte de este Consejo. No solo es saber qué ha pasado con lo sucedido en Camberra, sino saber cuál es la situación actual y cuáles serían las conveniencias o inconveniencias para nosotros como Iglesia Metodista de México de regresar.
El Dr. Olav Fykse contesta que su perspectiva en la actualidad es la de ver qué podemos hacer en este tiempo precisamente con toda la problemática que nos toca enfrentar, y no buscar la unidad en cuanto a los problemas presentados en Camberra. Actualmente podemos ofrecer solidaridad, la solidaridad de cargar la cruz juntos para ayudar a los necesitados, refugiados, los pobres, etc. Nuestra meta ahora no es actuar ecuménicamente, sino de unirnos en solidaridad para ayudar a los necesitados. Cómo podemos encarar juntos retos como vivir con musulmanes, hindúes, y otras religiones. Nosotros necesitamos a la iglesia de México para que nos ayuden a lograr esta meta y para lograr la unidad.
Se les preguntó si pudiéramos decir que el CMI está tratando más de enforcarse en la unidad para ayuda social y humanitaria, dejando de lado las cuestiones teológicas. Ellos contestan que en cierta forma sí, pero que también están tratando de atender las cuestiones teológicas. Después de una larga explicación, finalmente manifiestan que las iglesias nombran a sus representantes ante el CMI y son las iglesias las que manejan su propia teología. Ellos no rechazan a ningún representante de ninguna iglesia, sea cual fuere su teología. Esto pensamos que es un punto muy serio a considerar.
En la junta con el Gabinete General solicitamos la participación del pastor Bernabé Rendón para compartirnos el análisis del informe que en su momento presentaron nuestros delegados a la Asamblea del CMI en Camberra, Australia. Después de analizarlo, donde básicamente se tocan todos los puntos antes mencionados, ellos respondieron con la misma información que nos habían dado ya en el Colegio de Obispos. Expresamos nuestra gratitud por su disposición para presentarse con nosotros y explicarnos los eventos sucedidos anteriormente y la situación de lo que pasa actualmente en el CMI. Les solicitamos que nos enviaran los reglamentos y estatutos que actualmente están vigentes y los lineamientos de cómo se está trabajando en este momento. Ellos quedaron de enviarnos todo lo que tienen por escrito. Se les informó que de aquí a la próxima Conferencia General nosotros seguiríamos analizando toda esta información para poder tomar ahí, en esa Conferencia la decisión final de si terminamos el estado de suspensión de relaciones y regresamos a retomar el estatus de activos ante este organismo global o se toma otra decisión. Nos despedimos en muy buenos términos y terminamos nuestra reunión.
La siguiente tarea es que cada conferencia nombre a quienes integraran la comisión Nacional por parte de nuestra amada IMMAR, para continuar el dialogo con los representantes del CMI y presentar el proyecto para permanecer o no en el CMI, según lo acuerde La Conferencia General en mayo del 2022.
Agradecemos a Dios por esta oportunidad que nos dio de tener esta entrevista y platicar con nuestros hermanos todos estos asuntos para tener la información correcta y actualizada. Creemos que esta entrevista fue muy productiva y seguiremos trabajando en este asunto como se acordó en la Conferencia General. Agradecemos a nuestros hermanos por sus atenciones y por el tiempo que nos dedicaron. Esperamos que Dios nos guíe como iglesia en todo este proceso y en las decisiones que en su momento se tengan que tomar. Dios sea con todos nosotros
Bendiciones en Cristo.
Atte. Colegio de Obispos.
Obispo José Antonio Garza Castro. Presidente del Colegio.
Obispo Felipe de Jesús Ruiz Aguilar. Presidente Gabinete General.
Obispo Rodolfo Rivera de Rosa.
Obispa Raquel Balbuena Osorio.
Obispo Moisés Morales Granados.
Obispo Rogelio Hernández Gutiérrez.
